Por qué prohibir el porno no es una solución
Ante la alarma social por el consumo de pornografía por parte de adolescentes y por cómo eso puede estar afectando a su visión de la sexualidad, hay quien plantea prohibir el porno. Pero esta es una medida muy drástica, innecesaria, y que si se aplicara dificultaría, precisamente, una de las actividades que deben acompañar a la sexualidad: la reflexión.